Afuera del volcán, sin embargo, lo están esperando otros quinientos soldados enemigos. Burbuja se dispone a combatirlos a todos cuando ve que, abriéndose paso entre los uniformes plateados, aparece el mismo Volcano con su peinado moldeado con Gel Ultrabrillante. Por primera vez, la entereza del Capitán Burbuja flaquea: ¡Volcano, el archivillano no es otro que su hermano! Los ojos de Burbuja y de Volcano se encuentran y es como si se enfrentaran las fuerzas cósmicas de la luz y la oscuridad. Por unos momentos, el universo entero se paraliza. Sin interrumpir el contacto visual, ambos hermanos se llevan la mano a la cintura buscando sus letales espadas... En ese preciso instante, se escucha una fuerte explosión proveniente del interior del volcán. Todas las miradas se dirigen hacia la boca del Vesubio para comprobar con horror que ahora no son burbujas las que se elevan hasta el cielo sino una fumarada de guijarros y de fuego. ¡Al tratar de abrir la caja de cristal, en la guarida de Volcano, el Capitán Burbuja se ha equivocado de botón y ha activado la bomba que convertirá en piedra a todos los habitantes de Pompeya! El histórico duelo fraterno ha quedado en el olvido. Ahora todos huyen en desbandada por las calles de la ciudad, incluyendo al propio Burbuja...